Galicia es una región con una historia rica y diversa que se remonta a la época romana. Durante este periodo, la región se convirtió en una importante provincia del Imperio Romano y se desarrolló una cultura que aún perdura en la actualidad. En este artículo, exploraremos la época romana en las tierras gallegas, detallando los eventos históricos más importantes, la arquitectura y la cultura de la época.
La época romana en Galicia comenzó en el siglo II a.C. cuando los romanos empezaron a expandirse por Hispania. En el año 133 a.C., el general romano Décimo Junio Bruto Galaico conquistó la región y estableció una importante presencia militar. Durante los siglos siguientes, Galicia se convirtió en una provincia importante del Imperio Romano, y se construyeron numerosos asentamientos y edificios.
Uno de los asentamientos romanos más importantes en Galicia fue Bracara Augusta, actualmente conocida como Braga en Portugal. Esta ciudad fue fundada en el año 16 a.C. y se convirtió en la capital de la provincia romana de Gallaecia. En Bracara Augusta se construyeron importantes edificios como el Templo de la Fortuna Augusta y el Palacio Imperial.
Otros asentamientos importantes incluyen Lugo, que todavía cuenta hoy con el mejor ejemplo de muralla romana de todo el mundo, y A Coruña, que fue fundada como un puerto militar romano conocido como Portus Magnus Artabrorum.
La conquista romana de Galicia, aunque se produjo relativamente tarde, fue especialmente violenta. La resistencia galaica fue feroz, y los romanos tardaron más de 200 años en controlar por completo la región. Durante este tiempo, se produjeron numerosos levantamientos e insurrecciones, incluida la Revuelta de las Germanías en el siglo III d.C.
La arquitectura de la época romana en Galicia sigue siendo un ejemplo impresionante del legado romano en la región. La mayoría de los edificios construidos durante este periodo se centraron en la construcción de asentamientos y fortificaciones.
Los romanos construyeron una serie de fortificaciones en toda Galicia con el fin de proteger la región de incursiones y ataques enemigos. Las murallas romanas de Lugo, una de las construcciones defensivas mejor conservadas de la época, se extienden más de dos kilómetros por el centro histórico de la ciudad y son Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Los edificios públicos romanos en Galicia, como los templos y teatros, eran menos impresionantes que en otras partes del imperio, debido a la naturaleza rural de la región. Aún así, se construyeron algunos edificios notables, como el Templo de la Fortuna Augusta en Bracara Augusta y el Teatro Romano en Lugo.
La religión era una parte importante de la vida romana en Galicia. La mayoría de los templos romanos en la región estaban dedicados a deidades romanas, pero también se construyeron templos para divinidades locales. El Santuario de los Remedios en Lugo es un buen ejemplo de este tipo de templo, dedicado a la diosa galaica de la fertilidad y la sanación.
La cultura de la época romana en Galicia se caracterizó por una mezcla de la cultura romana y la cultura local galaica. Los romanos impusieron su propia cultura y lengua, pero también fueron influenciados por las costumbres locales y las divinidades.
El latín se convirtió en la lengua oficial del Imperio Romano y, como resultado, la mayoría de los habitantes de Galicia de la época romana hablaban latín. Los romanos también introdujeron la escritura, y se han encontrado inscripciones en latín en toda la región.
Los romanos respetaron muchas de las costumbres y tradiciones locales de Galicia, aunque también impusieron sus propias políticas y leyes. Muchas de las divinidades locales fueron adoptadas en la religión romana y se les dio un lugar en el panteón romano. También se desarrolló una mezcla de la cultura romana y la cultura local, como la cerámica y la alfarería que se produce en la región, que combina técnicas romanas y autóctonas.
La época romana en las tierras gallegas dejó un legado impresionante de arquitectura y cultura, que aún se pueden ver hoy en día en muchos lugares de la región. La conquista romana de Galicia fue violenta y tardó más de 200 años en completarse, pero la fusión de culturas que se produjo durante este tiempo es un ejemplo interesante de cómo las culturas pueden conjugar y enriquecerse entre sí. La época romana en Galicia sigue siendo un elemento clave de la historia y el patrimonio de la región.