Galicia es una tierra rica en cultura, historia y gastronomía. Y si hay un ingrediente que destaca por encima de los demás en la cocina gallega, ese es, sin duda, las algas. Estos seres marinos que viven en las rocas y que parecen alcanzar la perfección en las aguas del Atlántico, son una deliciosa fuente de sabor e inspiración para la cocina gallega.
Las algas forman parte de la cultura culinaria gallega desde tiempos inmemoriales. Los antiguos pueblos celtas que habitaron la costa gallega ya las conocían y utilizaban en su dieta diaria. Pero es en el siglo XX cuando las algas comienzan a tener un mayor protagonismo en la gastronomía gallega.
El chef Ángel León es uno de los principales responsables de la popularización de las algas en la alta cocina. Gracias a su trabajo y a su amor por la gastronomía marina, ha conseguido situar a estas delicadas hojas verdes en el epicentro de la cocina gallega contemporánea.
En Galicia podemos encontrar una gran variedad de algas comestibles. Entre las más conocidas, destaca el nori, una alga roja que se utiliza para hacer sushi; la wakame, una parda que se utiliza en ensaladas y sopas; y la lechuga de mar, una alga verde y crujiente que se emplea en platos de pescado y marisco.
Pero también existen otras variedades menos conocidas, como el huiro negro, que se utiliza principalmente en platos de carne; el huiro palo, que tiene un sabor muy similar al caviar; la codium, que se emplea en ensaladas y como guarnición; o el agar-agar, que tiene un gran poder espesante y se utiliza en postres y salsas.
Las algas son un ingrediente muy versátil en la cocina. Se pueden preparar en ensaladas, sopas, guisos, potajes, cremas, arroces y muchos otros platos. Pero para sacarles todo su potencial, es importante saber cómo tratarlas correctamente en la cocina.
En primer lugar, hay que hidratar las algas. Para ello, se deben sumergir en agua fría durante unos minutos, hasta que se vuelvan blandas y flexibles. Luego, se escurren y se cortan en trozos del tamaño deseado.
También es importante tener en cuenta que las algas tienen un sabor muy marcado y potente, por lo que hay que emplearlas con medida y cuidado. En la cocina japonesa, por ejemplo, se suelen utilizar en pequeñas cantidades para potenciar el sabor de otros ingredientes.
En Galicia, las algas se utilizan de muchas formas diferentes. Algunos de los platos más emblemáticos de la cocina de las algas son:
En definitiva, las algas son un tesoro culinario de la costa gallega. Su sabor intenso y su textura delicada las convierten en un ingrediente único y lleno de posibilidades en la cocina. La gastronomía de Galicia sería impensable sin ellas, y esperamos que sigan siendo una fuente de inspiración y creatividad para los chefs gallegos durante muchos años más.